Hoy voy a exponer una observación y opinión personal acerca de un juego: Race Driver GRID.
¿Por qué una opinión y no una crítica comparativa, o jodelona asecas? Pues porque no tengo conocimientos suficientes ni experiencia en el campo de los videojuegos de conducción como para poder criticar. Así de claro.
Empecemos por lo más visual, literalmente: Los gráficos. Se trata de un juego con unos gráficos bastante notables, y unos efectos visuales muy conseguidos, en mi opinión. La visión puede ser bastante desesperante desde la cabina cuando hay tierra, accidentes, falta de luz o movimientos bruscos por delante, lo que es un magnífico punto a tener en cuenta en mi valoración.
La única parte visual que merece un punto negativo es el movimiento del volante. A pesar de que el coche responde tal y como quieres controlarlo con el mando, el volante del coche se mueve dando giros bruscos, que quitan realismo a la parte gráfica.
Dentro del campo de la versatilidad, me gustaría destacar la diversidad de opciones que tenemos a nuestra disposición para adaptar el videojuego a nuestros gustos, tanto si queremos que se acerque a la simulación como si queremos que se acerque al arcade, con una serie de ayudas que podemos activar o desactivar, tales como ayuda en el frenado, o control de tracción.
La historia del juego es simple: Eres un piloto profesional que, a base de correr para empresas de carreras y fundar tu propio equipo de competición, debe ascender en el ranking de mejores corredores. Simple, ¿No? Pues claro, en un juego de conducción deportiva como este, no es la historia lo que debe destacar, sino el siguiente punto que vamos a tratar.
La jugabilidad. Este es el punto que cualquier gamer debe tener más en cuenta al comprar un juego. RD GRID ofrece una gran cantidad de pruebas: Desde competiciones de derrape asiáticas, como carreras americanas por circuitos estrechos, pasando por competiciones puramente europeas en circuitos anchos y limpios. En estas tres nacionalidades se clasifican las numerosas pruebas: Americanas, Europeas, y Japonesas.
Controlar tu equipo de carreras es lo que se lleva, en mi opinión, el punto estrella en este juego. El hecho de poder escoger patrocinadores (Con sus características y recompensas propias), elegir el exterior de los coches del equipo, y poder contratar, despedir y reemplazar a tu compañero de carreras, supone un extra de personalización para un juego que, sin ello, se acercaría más a lo que viene siendo un videojuegos típico de carreras como TOCA Race Driver, que no es más que eso, un juego de correr en coches.
El último punto de jugabilidad que me gustaría tratar es el de la conducción: Se trata de un videojuego bastante arcade, aunque tiene su posibilidad de acercarlo a simulación, como antes dije, por lo que los controles tienden a ser rápidos y bruscos. Los giros son rápidos, con posibilidad de marcarte un precioso derrape, y salir despedido de la curva a toda velocidad. Las frenadas son bastante veloces, más de lo que debería, en mi opinión, pero fiel a lo que un juego arcade necesita. Y por último, y no menos importante, la diferencia entre coches: La verdad, se aprecia la diferencia entre un Dodge Viper, y un Mazda RX7 en cuanto a conducción, algo que agradezco enormemente a Codemasters, dado que son muchos los juegos en los que solo se diferencia en cuanto a velocidad. Aquí sientes incluso el peso del coche en los derrapes, lo que es gratificante para el jugador, y desde luego, ameniza las numerosas y, por qué no decirlo, repetitivas a veces, pruebas que te propone el juego.
En definitiva, sí, es un juego que merece la pena. Mucha gente se habrá tirado de los pelos intentando decidirse entre RD GRID o NFS Shift, dado que ambos son de la misma generación.
¿Mi opinión? GRID posee más acción que NFS, así que si lo que buscas es un subidón de adrenalina al volante de un coche, GRID es tu juego.